El Festival Nacional de Doma y Folclore de Jesús María sufrió este miércoles su noche más triste en 45 años de historia al morir un jinete.

El domador Alfredo Espíndola, suplente de la delegación de Misiones,
fue aplastado por el caballo antes de que se iniciara su monta y
padeció múltiples traumatismos y una profusa pérdida de sangre que
derivaron en su deceso.

Tras ser atendido durante algunos minutos en el campo del anfiteatro
José Hernández, fue trasladado a la sala de terapia intensiva del
Sanatorio Caroya, pero no pudo ser salvado.

Según lo relatado a Cadena 3
por el delegado de los jinetes de Jesús María, el caballo se les escapó a los palenqueros antes de la largada, se sentó y aplastó a Espíndola.

Por su parte, el capataz de campo defendió su accionar y remarcó que él
aún no había autorizado la largada cuando ocurrió el accidente.

Desde un primer momento, todos los colegas del jinete caído decidieron
no continuar con la doma, al menos durante esta sexta velada del
festival.

En medio del dolor y de una gran confusión, la comisión organizadora
del festival decidió seguir con el espectáculo en el escenario y el
encargado de comunicarlo fue el conductor Carlos Franco, quien no podía
ocultar su conmoción.

Pero en las tribunas ya no había ánimo para continuar y el público, que
comenzó a retirarse espontáneamente, forzó a los organizadores a parar
por completo todas las actividades.

Los directivos informaron a los espectadores que conserven sus
entradas, que podrán ser utilizadas en cualquiera de las noches del
festival.

Spíndola queria dedicarle la monta a su hijo que el dia de ayer cumplio el primer año de vida...